El diseño del departamento M. S. fue pensado para un hombre soltero, con una estética de los años sesenta y en un registro masculino. Se trabajó en un gran espacio multifuncional donde conviven living, sala de estar y bar, junto al comedor y la cocina.
Se eligieron tonos azules, verdes y turquesas, que conjugan muy bien con la arquitectura del departamento. Se mezclaron maderas nobles con plantas de interior y un papel mural que también alude a la madera, dotando de una atmósfera más acogedora a este gran espacio abierto.